Según información de L’Équipe, Lionel Messi no seguirá defendiendo la camiseta del PSG durante la próxima temporada. Para el conjunto parisino nunca ha sido un problema presentar una oferta atractiva para que el argentino alargara su estancia en la capital francesa, habiendo incluso llegado a un acuerdo verbal hace unos meses.
En los últimos años, el PSG ha sido un club duramente criticado por su “pasividad” a la hora de manejar situaciones extra-cancha con sus jugadores, haciendo pensar que algunos elementos de la plantilla estaban por encima del propio club. Este problema molestaba principalmente a los Ultras del equipo, quienes en anteriores ocasiones ya han presionado a la directiva para que tuvieran una “mejor” toma de decisiones.
La presión de los aficionados radicales de un equipo deportivo puede ser un factor determinante en la toma de decisiones de los líderes del club. En el caso de Nasser Al-Khelaïfi, presidente del Paris Saint-Germain, no es diferente. La afición del PSG es conocida por ser muy apasionada y exigente, y los aficionados radicales del equipo han influenciado en la toma de decisiones de Al-Khelaïfi en numerosas ocasiones.
Uno de los momentos más destacados en los que la presión de los aficionados radicales se hizo sentir fue durante la temporada 2016-2017. A pesar de que el PSG había ganado la Ligue 1, la copa francesa y la copa de la liga francesa, la temporada se consideró un fracaso debido a la eliminación temprana del equipo en la Champions League. Los aficionados radicales culparon a Al-Khelaïfi por la falta de inversión en el equipo y por no fichar a jugadores de élite.
Como resultado, Al-Khelaïfi decidió dar un giro en la estrategia del club y se lanzó a fichar a los mejores jugadores del mundo, entre ellos Neymar y Kylian Mbappé. Estos fichajes no solo cambiaron el rumbo del PSG, sino que también elevaron el nivel de la Ligue 1 y situaron al equipo en la cima mediática del fútbol europeo.
Ruptura entre Lionel Messi y el PSG, ¿ocasionada por la presión de los aficionados?
Otro momento en el que la presión de los aficionados radicales tuvo un impacto significativo fue durante la temporada 2019-2020. El PSG perdió la final de la Champions League ante el Bayern de Múnich, lo que provocó una gran decepción entre los aficionados. Sin embargo, a pesar de la derrota, los aficionados radicales pidieron a Al-Khelaïfi que mantuviera a Thomas Tuchel como entrenador del equipo, ya que habían quedado impresionados con el estilo de juego del equipo durante la temporada.
En este sentido, Al-Khelaïfi podría estar actuando bajo la presión de la parte de aficionados que pide al club no poner a ningún jugador por sobre la institución a la hora de tomar la decisión de sancionar a Lionel Messi (2 semanas de suspensión), y por ende, replantearse su oferta de renovación de contrato. Evidentemente, a esto habría que sumarle las opciones que maneja el argentino para su futuro.
En definitiva, la presión de los aficionados radicales ha tenido un impacto significativo en la toma de decisiones de Nasser Al-Khelaïfi como presidente del Paris Saint-Germain. Sin embargo, no siempre ha sido negativa, y en algunos casos ha llevado a decisiones acertadas que han impulsado al equipo a la cima del fútbol europeo. Los aficionados son una parte fundamental del club, y su opinión debe ser considerada de alguna u otra forma. ¿Será este un buen ejemplo?
Parisinos.net | Manuel Meza